Pues sí, 15 meses después, me toca decir adiós a ese periodo dulce en el que nos parecemos más que nunca a un hombre en lo que a nuestras obligaciones hormonales periódicas se refiere. Tristemente vuelvo a ser mujer, y es un auténtico fastidio, la verdad, ahora que me había acostumbrado a ahorrarme un pastón en productos de higiene íntima y a ir a donde quisiera cuando me apeteciera (salvo por lo de tener un bebé de alta demanda colgando de un pecho, claro). Ahora tocará estar pendiente otra vez de las fechas, del “¿Cómo es posible que me haya olvidado de meter una compresa en el bolso?”, de mis drásticos cambios de humor… Uf, solo pensarlo me da pereza, la verdad. Me había olvidado de tal modo que cuando me vino casi me sorprendí tanto como cuando me vino por primera vez, pobre ilusa.
Útero. Ilustración de Natalia Alterna en Flickr. Licencia CC-By-SA
Y eso que yo era de esas madres primerizas decididas a dar el pecho sin tener absolutamente ni idea de lactancia; tanto, que ni sabía que durante la lactancia no te venía la regla, al menos los primeros meses, porque el cuerpo necesita dedicarse a amamantar a un bebé y no a fabricar uno nuevo. Y que hasta hay un método anticonceptivo basado en esto, el MELA, que tiene una eficacia similar a la del uso del preservativo. Después me he ido culturizando un poco más sobre el asunto y he descubierto que en muchos casos te vuelve sobre los 6 meses aunque sigas dando el pecho. Me pregunto si tendrá algo que ver con la alimentación complementaria y con el hecho de reducir el número de tomas porque en mi caso ambas cosas, la menor producción de leche y el regreso de la menstruación, han ido de la mano (aunque puede ser sencillamente fruto de la casualidad, no porque ambas cosas coincidan en el tiempo hay causalidad).
El caso es que, como os digo, me da una pereza terrible… parece que mi cuerpo está ahora muy poco acostumbrado a esto y ando mareada, como sin fuerzas y con muchísimo sueño… pero qué le vamos a hacer, no por tener pereza dejará de venirme a no ser que me embarazara de nuevo y eso, definitivamente, me da más pereza aún. Por el momento, al menos.
¿Y vosotras cuándo volvisteis a la menstruación después del parto?