Las nuevas tecnologías y la noticia de un embarazo en la familia son un arma de doble filo. Creedme, el tema puede hacerse viral y ya no lo controlas tú, sino que toma vida propia como un ente que se va distribuyendo por tu red de contactos. Además, los que se sitúen en la cola de esta red de viralización de la noticia siempre te echarán en cara no haber estado en la cima de la pirámide. “¡Pues fulanito se enteró antes que yo!”, o “¡Cómo es que a mí me lo contó menganito por whatsapp!”.

Así que nosotros intentamos utilizar una metodología presencial y mantener una cierta jerarquía:

• Padres y hermanos
• Resto

Más o menos dio resultado, aunque siempre es complicado que las madres de hoy tengan un smartphone en el que se dedican a enviar a todos sus contactos cosas de este estilo cada día de la semana:

¡Cuánto daño hacen estas imágenes virales a la ortografía española!

Si dedican su tiempo a eso, imaginad a extender una noticia que realmente es importante. Lo cierto es que me hace ilusión que les haga ilusión, pero tuvimos que poner coto diciendo: “Se lo podéis contar a quien queráis, pero por favor decidles que no me publiquen una enhorabuena públicamente en mi muro de Facebook porque sería desagradable que hubiese gente que se enterase así antes de que yo se lo diga”.